Mente Sana = Cuerpo Saludable = Calidad de vida

Mente Sana = Cuerpo Saludable = Calidad de vida
Directora y Creadora: Arantxa Arregui Arizaga

miércoles, 10 de junio de 2020

TU CORAZÓN ES TU MAESTRO



LA MENTE TEME……. EL CORAZÓN LO SABE
“Bonita” sociedad ésta que nos toca vivir, que nos aleja tanto de nuestra verdadera naturaleza. No hay nada, absolutamente nada en su sitio si atendemos al diseño original.
Una sociedad separatista, con crisis aguda de valores, desconectada de los ritmos naturales, sumida en el miedo…
Éste es nuestro escenario y no otro, por lo tanto toca asumirlo y hacer lo que se pueda con ello.
Ese “lo que se pueda” es un abanico muy amplio de posibilidades, pero en este escrito voy a hablar del precio que pagamos cuando nos decidimos por la opción de CONTINUAR una forma de vida que había servido…. hasta ahora.

Generalmente vivimos vidas en modo automático, los programas se despliegan y ejecutan con impecabilidad, generamos inconscientemente la realidad, aportándonos en cada momento las experiencias que necesitamos.

Como se tratan de procesos inconscientes y automáticos, no es difícil que alguna esfera de nuestra vida esté lejos de ser como nuestra Mente Consciente desearía. Una vez tras otra repetimos patrones dolorosos en las relaciones de pareja, o con la familia, o con los amigos, o en con el trabajo…

Cuando eres ajeno a esta información, vives tu vida con un simple “la vida es así” en el fondo de tu mente, resignado. Pero cuando llega el momento en que tomas conciencia de lo que está ocurriendo, cuando te das cuenta que esas situaciones de dificultad las has generado y alimentado tú, si permaneces sin hacer cambios y ordenarte, estás en una situación más complicada de lo que piensas. Hasta este momento somatizabas tus incoherencias de vez en cuando, quizás incluso con mucha fuerza.
Pero cuando sabes que tu vida ya no te llena en tal o cual asunto, tu cuerpo gira el mando de la intensidad del dolor a tope. Precisamente es ese el mecanismo que nos empuja a hacer cambios en nuestra vida. Tu cuerpo y tu mente te están gritando que algo no va bien.
Si escuchas esa llamada de auxilio y la atiendes, todo se reordena con el tiempo. Pero si no lo haces y te empeñas en quedarte donde estás, en ese trabajo que ya no te llena, con esa pareja por la que ya no sientes como años atrás, relacionándote con personas con las que no tienes nada en común, desviviéndote por los demás y olvidándote de tus anhelos profundos, estás bien jodido. Amigo, esa posición es tan respetable como cualquier otra, pues aporta una información muy valiosa a tu Inconsciente de LO QUE NO QUIERES.

 Tu Inconsciente te lo agradece, bonito e intenso aprendizaje. Sientes sus palmaditas en tu hombro y oyes como te dice: “muy bien amigo, muy bien, mi querido sufriente…”. En ese estado te acompaña una sensación devastadora de insatisfacción vital, de tristeza que parece no quererse ir nunca.

Sabiendo que hay otras opciones también puedes explorarlas, si te apetece. Cuando pones orden en tu vida, poco a poco tu realidad se alinea con tu sentir. Empiezan a pasar cosas que nunca antes experimentaste, tu forma de ver la vida cambia y empiezas a disfrutar más de las pequeñas cosas.
Poco a poco tu atención deja de estar en el pasado o en el futuro y se instala en el momento presente.
Aquí ocurre la magia, empiezas a conectarte con tu verdadera naturaleza, sientes pálpitos en tu vida cotidiana que antes pasaban desapercibidos para tí porque estabas distraído regodeándote en tus miserias.
Empiezas a sentirte un verdadero mago Merlín enfocándote con conciencia en aspectos importantes para tu ser profundo.
Como alimentas esas partes de ti, tus ojos brillan más que nunca, te ilusionas con nuevos proyectos, te enamoras de la perfección del Universo aportándote aquello que necesitas en cada instante (que por cierto, ya no es doloroso porque no se ha creado inconscientemente desde el dolor).

Aceptas que no existe la seguridad de nada y te conviertes en un experto surfeando las impredecibles olas de la vida. En definitiva, vives el cielo en la Tierra.

Estamos en crisis (dicen por ahí), igual es una buena excusa para revisar cuál es el precio que quieres pagar…

Por Carlos Muñoz (Software Rojo).

Gracias y Un Abrazo Fraternal.
Arantxa Arregui.

www.arantxaarregui.com
www.naturarantxa.es